viernes, 29 de enero de 2010

EL PALACIO DE LOS VENEGAS, ORATORIO DE SAN FELIPE NERI


Fachada Palacio de los Venegas
Fachada del Palacio de los Venegas.


Corría el siglo XIII, Fernando III estaba acampado en los alrededores del Santuario de la Virgen de Linares. En el lugar citado se encontraba una antigua atalaya de origen árabe, aún existente y que forma parte del santuario, donde la tradición dice que, el rey ordena colocar una imagen de la virgen, ofreciendo una misa antes de atacar Córdoba, como si las vírgenes se ocuparan partidistamente de esas cosas. El nombre de la virgen está un poco confuso. Pudiera ser que el sacerdote que dijo la misa fuese un jiennense de Linares, o que el término Linares derivase de las torres vigía, nombre árabe de las citadas torres.

Pero no nos ocupa en este caso ni el Santuario ni la virgen, si no uno de los caballeros que viajaban con D. Fernando y que se llamaba Venegas de apellido, D. Pedro. Los Venegas son oriundos de Portugal su apellido parece haberse cristianizado -cambiorum chaquetorum-, normal en todos los tiempos, y derivar de Ben Egas de raíz musulmana.

Fachada del Oartorio
Fachada del Oratorio.

Pasó el 1236. D. Fernando conquistó Córdoba, no por su poder ni por la Virgen, sino por la descomposición de lo que quedaba del Califato; las traiciones; los advenedizos y todo lo demás. Llegó la hora del reparto y como es normal, los cercanos al rey, y como “el que reparte y reparte…”

D. Pedro echó raíces en esta ciudad, era descendiente de D. Suero Venegas, señor de Lamego, rico portugués, obtuvo las propiedades que “le tocaron” por sus servicios. Fue Alcalde Mayor de Córdoba, guardián y redactor del fuero que le concedió el conquistador D. Fernando a la ciudad.

Un descendiente suyo D. Egas Venegas, siguió el camino ampliando la fortuna familiar, por su cercanía a Alfonso X el Sabio, y a su hijo D. Sancho. Se desposó con Doña Mayor Fernández de Castro. Fue primer señor de Luque.

Otro fue capitán del rey Don Pedro, sirviéndole fielmente hasta su indisposición con los Caballeros de Córdoba, le prestó su apoyo a su hermano bastardo D. Enrique y fue artífice de la victoria de éste contra su hermano Pedro I en el Campo de la Verdad. Se casó con doña Beatriz y ambos, en 1370 crearon o fundaron el Convento de las Dueñas.

Balcon Palacio
Balcón del Palacio .

Otro descendiente fue Obispo de Córdoba, D. Gonzalo de Venegas, y las ramas de este árbol crecieron y crecieron lo mismo que la fortuna de la familia. Se emparentaron con los Fernández de Córdoba, de la Casa de Aguilar. Son muchas las historias verdaderas o de ficción de este apellido, como la que le sucedió a otro D. Egas de Venegas que vivía en la calle Lope de Hoces, cerca del muladar de la Trinidad, en 1510 se cayó desde el balcón porque cedió este y parte de la fachada, muriendo bajo los escombros. Algunos frailes del convento de enfrente, el de la Trinidad, vieron el accidente. Uno de ellos, Fray Nicolás, puede que tan listo como Sor Constanza de Rivera, la “Aramis Fuster de la época” del Convento de Santa Inés, dijo haber tenido la revelación de que D. Egas, por el que había rogado, se le había aparecido para darle, en primer lugar las gracias y después para decirle que se había cortado la lengua en el accidente –a lo mejor en el estado astral no es necesaria la lengua para hablar con los frailes, o se lo diría por señas-, la gente acudió en masa al difundirse la revelación y luego el Obispo, los cuales comprobaron con estupefacción, que el cadáver que llevaron a Ómnium Sanctórum, tenía la lengua partida. La familia le tomó ojeriza a la casa por la desgracia y D. Juan la vendió a D. Martín de los Ríos (Casos raros de Córdoba).

Artesonado
Artesonado .

Frente del cementerio de Ómnium Sanctórum, a finales del siglo XVI se construyó el palacio de los Venegas. Su fachada ha sufrido muy pocas modificaciones desde su creación afortunadamente.

“con dos portadas gemelas, con sendos escudos de los Venegas y dos torreones flanqueando el conjunto. Está datada en 1589 y se atribuye a Juan de Ochoa. La iglesia presenta fachada barroca a la calle S. Felipe, con pilastras de grandes dimensiones. Cubierta: Inclinada de teja cerámica en toda la edificación con balaustrada en fachada.” (Según el Catalogo de bienes protegidos del centro histórico de la GMU).


Otro Artesonado3
Otro Artesonado .

Dentro tiene unos bien conservados artesonados, que no menciona el citado catalogo, posiblemente sólo se catalogue el “ladrillo”. D. Teodomiro Ramírez de Arellano dice:

“En su interior tiene seis preciosos artesonados que llaman la atención de cuantos los ven, y que merecen conservarse con esmero, como en gran parte lo ha sido hasta el presente.”

Entendiendo ese presente como el año de la edición de los Paseos por Córdoba, 1873 o unos años antes.

Tiene también algunos cuadros que, sin ser un experto estimo que pudiera representar uno de ellos la muerte de Alonso de Aguilar, aunque es una enorme pretensión por mi parte decirlo.


Otro Artesonado2
Otro artesonado .

El palacio se lo vende D. Luis Venegas de Henestrosa, a finales del siglo XVII a D. Luis Antonio Belluga y Moneada, motrileño, nacido en 1662, que fue Obispo de Almería, que hizo la lectoral de la Catedral de Córdoba y estuvo aquí hasta el 1704, año en el que fue nombrado Obispo de Cartagena, después de empujarle el Cardenal Salazar y el Padre Posadas. El Cardenal Salazar, fundador del Hospital de su nombre, luego de Agudos y ahora Facultad de Filosofía y Letras, lo consagró en el cargo de Obispo de Cartagena y para allí partió D. Luis Antonio Belluga el 19 de abril de 1705.


Obras Oratorio
Obras en el Oratorio.

Anteriormente había fundado el Oratorio de San Felipe Neri en el que vivió con los frailes hasta el 1704. Había construido una pequeña iglesia que fue bendecida en septiembre de 1696. Después se hizo otra mayor que es la que existe en la actualidad y está trabajándose en su puesta en valor por dos escuelas taller. Esta nueva se atribuye a Hurtado Izquierdo. La iglesia tiene planta de cruz latina y una cúpula en el crucero.

Planta capilla
Plano de planta de la Iglesia.

En 1720 fue dedicada a la Virgen de los Dolores, y se celebro un notable acontecimiento religioso, un triduo en el que intervino D. Juan Bautista Alegre del Oratorio de Valencia, costeando los gastos el Cardenal, luego D. Juan Gómez Bravo y el tercer día D. Pedro del Busto.

La Desamortización de Mendizábal, en 1836, afectó también a los filipenses, aunque estos no eran frailes, y a pesar de que se deshizo el entuerto por real orden, no se restablecieron. Decir que el Oratorio lindaba con el Convento de la Concepción, ocupando ambos casi toda la manzana.

En esas fechas su uso fue militar y transformado en Cuartel. Las imágenes se trasladaron a la Trinidad, donde dice D. Teodomiro que existía un San Felipe y San Carlos Borromeo. En 1862, el Brigadier D. Juan Guillen Buzarán, lo dividió, instalándose en él para utilizarlo como residencia, como ocurre aún en la actualidad con el General de la Brigada. En 1876, D. Rafael Carrillo y Gutiérrez, Gobernador Militar restauró la fachada y el interior.

Cuartel
Cuartel.

Hoy en día, el palacio lo ocupan las dependencias de la Subdelegación de Defensa en Córdoba, que aglutina diversas dependencias, como las Áreas de Patrimonio y Reclutamiento, por citar dos de ellas, siendo esta última la que se encarga de hacerle todas las pruebas de acceso a los aspirantes a soldados profesionales. Justo es decir para terminar, que la presencia del Ministerio de Defensa antes de la Guerra, ha permitido que la piqueta no entre a saco en este palacio.


Plano Catastral
Plano Catastral . 2529 mts.2 de suelo y 5034 mts.2 construidos.

Fotografías de la GMU, AHM, Catastro y autor.

6 comentarios :

José Manuel Fuerte dijo...

Un edificio realmente hermoso, que siempre me ha llamado la atención, y que pienso que es uno de esos lugares "ocultos" a los que pocos hacen referencia y que hacen atractiva nuestra ciudad.

Debe ser gratificante cruzar cada día sus puertas para ir a trabajar en su interior, y disfrutar de este, intramuros, cosa que no todo el mundo puede hacer, aunque su exterior es lo suficientemente bello como para detenerse a contemplarlo.

Paco Muñoz dijo...

Estimado Ben, si que lo es. Ahora la iglesia está separada físicamente del resto, antes era un todo, es decir podías acceder a ella aunque estaba vacía.

El patio principal es muy austero, barroco, uniforme y con un jardín, que seguramente fue el claustro -no estoy seguro por las modificaciones-, en fin.

Feliz fin de semana.

casandra dijo...

Excelente artículo Paco. Y doblemente valioso pues de este oratorio hay muy poca información.
Me ha inquietado sobremanera la pequeña fotografía que publicas de su interior. En ella se puede apreciar como están cegando uno de los monumentales arcos que por el plano supongo da acceso a una de las capillas. A priori diría que es una aberración y una más que pésima intervención de ese espacio monumental. Desconozco qué es lo que están haciendo ahí, pero eso que acabo de ver tiene una pinta malísima.

Paco Muñoz dijo...

Esa fotografía es del comienzo de la obra. Tienes que tener en cuenta que la capilla antes estaba unida al resto del edificio y ahora ha quedado aislada por completo, los accesos interiores están cerrados, e inclusive en el plano las entradas a las capillas laterales también, se ven pequeñas puertas no arcos completos. Además esa foto es mala, de la prensa, no me han permitido forografiar ahí. No se, habría que esperar a la terminación.

MariÁngeles Ortiz dijo...

Fantástico!!!

Paco Muñoz dijo...

Muchas gracias pero no es comparable al acopio de información familiar de tus trabajos. Un abrazo